sábado, 14 de enero de 2017

La desilusión de Ucrania y el triunfo de Rusia

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La desilusión de Ucrania y el triunfo de Rusia



La desilusión de Ucrania y el triunfo de Rusia
Antonio Rondón
Prensa Latina
Moscú, Rusia. 
En la medida que pasó 2016 fue mayor la decepción de Ucrania, al ver que el conflicto en el sureste (Donbass) estuvo lejos de aumentar la presión de Occidente sobre Rusia, cuya economía buscó alternativas a sanciones foráneas.

© Gleb Garanich/Reuters 

El año se inició con una reunión del Cuarteto de Normandía casi exactamente 1 año después del encuentro en la capital bielorrusa de 2015, que dio paso al llamado acuerdo de Minsk 2.
Los 12 puntos del arreglo, cuya lógica consecutiva fue concebida con toda intención por el cuarteto, dejó fuera a Estados Unidos para evitar la concreción de planes de Washington de resolver el diferendo por la fuerza e involucrar en él a Rusia.
Pero las acciones de Moscú en Siria, de su aviación, fuerza naval y personal especializado para algunas actividades específicas en tierra, dieron una visión de hasta donde había avanzado Rusia, tras la desintegración de la Unión Soviética en su poderío militar.
De hecho, los problemas serios empezaron a arreciar para la propia administración del millonario chocolatero Piotro Poroshenko que finalmente se deshizo del primer ministro Arseni Yatseniuk, una de las figuras plantadas por Estados Unidos en el gobierno golpista de 2014.
Ni siquiera las medidas neoliberales que el propio Yatseniuk debió reconocer eran duras para la población, le pudieron garantizar un cupo seguro para el apoyo incondicional de Washington a su permanencia en el poder.
Con independencia de la razón de la mayoría de políticos ucranianos en las últimas décadas de independencia: 
llegar al poder, robar rápido y todo lo que se pueda e irse, Yatseniuk gobernó en un momento que había poco recursos para malversar y era más evidente el robo.
En la medida que la salida militar en el Donbass se hizo cada vez más difícil para el gobierno desde el punto de vista de personal, armamentos y financiamiento de la guerra, más los ucranianos miraron con desconfianza a un gobierno que los timaba.
Decenas de miles de personas salieron a las calles en noviembre de 2013, sobre todo a la Maidan Nezelezhnaya, en el centro de Kiev, para exigir el vector occidental de desarrollo, en medio de una fuerte propaganda antirrusa de Occidente.
Ahora se conoce que el propio candidato republicano y ganador de las elecciones del 8 de noviembre en Estados Unidos, Donald Trump, se pregunta por qué se emplearon casi 5 mil millones de dólares para forzar gobiernos y otros menesteres.
Se sospecha que gran parte de ese dinero fue empleado en su momento para pagar tiendas de campaña, comida, aditamentos antimotines, cascos y hasta alguna que otra arma, con la cual se estima dispararon para eliminar a policías e incluso civiles como parte de una provocación.
Todos esos elementos incómodos sorprendieron casi al finalizar el año a la audiencia ucraniana, después que el defenestrado presidente Viktor Yanukovich aceptó participar por videoconferencia como testigo de un proceso judicial seguido en la propia Ucrania.
El objetivo del proceso era determinar, con cierto grado de parcialidad, que los responsables de la muerte de más de 200 personas durante las manifestaciones violentas fueron los dirigentes y funcionarios de la administración de Yanukovich.
Pero el exmandatario acudió a la sala del juicio con al menos dos gruesos tomos, donde, al parecer, acumuló pruebas de los desmanes ordenados por varios de los que ahora figuran en el ejecutivo o en el Parlamento.
El fiscal general ucraniano, Yuri Lutsenko, quien fuera ministro del Interior en tiempos del gobierno de Yulia Timoshenko, retrasó o puso en suspensión su presencia en el juicio.
Todo ello demuestra que la operación de entretenimiento ideada por Poroshenko para mantenerse en el poder sin movimientos populares con efectos similares a los de 2014 fracasó totalmente, con la aparición de miles de personas, nuevamente, en la Maidan Nezelezhnaya.
En esta ocasión, los reclamos son menos románticos y más concretos, con demandas de más salarios, menos recortes de gastos sociales y una reducción de las tarifas de gas.
Como afirmó Yanukovich en el juicio, el cuadro de desesperación de la población por medidas tomadas por el gobierno era, precisamente, lo que buscaba evitar su administración cuando postergó la firma de un acuerdo de asociación con la Unión Europea en 2013.
Poroshenko tiene poco que enseñar y muchos llegan a especular que podría tener los días contados, después de la victoria de Trump, a quien ofendieron públicamente en Kiev por admitir que podría tomar en cuenta la voluntad del pueblo de Crimea de separarse de Ucrania.

© desconocido

La desilución de Poroshenko y todos los que odian Rusia

Son pocos los que consideran que las protestas antigubernamentales de esta ocasión, a las que intentan monopolizar elementos ultranacionalistas y neofascistas, podrían llevar a la caída del gobierno, pero otros factores externos podrían tener el mismo efecto.
En la reunión del Cuarteto de Normandía (Rusia, Alemania, Francia y Ucrania), efectuada el 19 de octubre en Berlín, se pudo apreciar que el principal elemento de esas negociaciones estaba lejos de ser Poroshenko. 
El presidente ruso, Vladimir Putin, marcó pautas allí.
De hecho, el acuerdo del cuarteto fue recomendar la elaboración de una hoja de ruta para poner en práctica los arreglos de Minsk-2, sobre todo, tener en cuenta que el orden de cumplimiento de esa avenencia va de los asuntos de reforma política a los llamados de seguridad.
En los primeros se incluye una amnistía para todas las fuerzas beligerantes, elecciones locales en Donetsk y Lugansk, en el Donbass, y las correspondientes enmiendas en la Constitución.
Los de seguridad establecen una retirada de fuerzas y armamentos pesados de la línea de confrontación, intercambio de prisioneros inspecciones de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa, así como el control por Kiev de su frontera sureste.
En la reunión de ministros de Relaciones Exteriores del Cuarteto de Normandía en la capital belarrusa, el ruso Serguei Lavrov afirmó que a diferencia de eventos anteriores, Kiev al menos admitió la veracidad de lo acordado en Berlín, en lugar de presentar nuevas iniciativas.
Un avance, como está establecido, en el cumplimiento de los arreglos alcanzados en Minsk, pone de cabeza a la administración de Poroshenko que busca una provocación para llamar la atención de Estados Unidos y conservar a su protector.
Comentario: Más que una desilusión de Ucrania es una desilusión de los nacionalistas y neonazis anti-rusos ante la mayor influencia de la visión rusa y el derrumbe de la narrativa de sus jefes de Occidente sobre lo que ocurrió realmente. 
Cuando un periodista alemán planteó la cuestión de Crimea al presidente ruso, éste reaccionó con una pregunta: "¿En qué piensa usted cuando dice la palabra 'Crimea'?".
 "Un cambio en las fronteras", contestó el corresponsal de 'Bild'. 
"Pues yo pienso en la gente: en dos millones y medio de personas", señaló Putin. 
Les asustó el golpe de Estado producido en Kiev, explicó. 
Implicó a fuerzas extremadamente nacionalistas, que en parte se quedaron con el poder y en 2014 amenazaron directamente a la población rusófona. Eso era un problema para Crimea, porque allí hay más personas de lengua materna rusa que en otras partes de Ucrania.
Putin recordó que el comportamiento de los militares rusos en Crimea no implicó ninguna víctima mortal sino que, al contrario, evitó muertes humanas. 
"Usamos las Fuerzas Armadas para contener a los más de 20.000 militares de Ucrania y para que no intervinieran durante el referéndum de la población de Crimea. 
Aquellas personas participaron en el referéndum y votaron. 
Quisieron formar parte de Rusia". Ese referéndum fue un acto de democracia, una expresión de la voluntad del pueblo, aseguró el líder ruso. "Para mí no es importante el territorio y las fronteras, sino el destino de la gente", afirmó.
Abordó también el aspecto de la legalidad del cambio de soberanía.
"Es imprescindible siempre observar el derecho internacional", admitió. "En el caso de Crimea el derecho internacional no fue violado. De conformidad con la Carta de las Naciones Unidas, todos los pueblos tienen el derecho a la autodeterminación".

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Si nos han de robar, 
que sean otros y no los mismos de siempre

Si como votantes, no nos escuchan
como consumidores, lo harán
boicoetemos sus empresas.
Llevamos las de ganar. 

Como acabar con la ESTAFA de las ELÉCTRICAS... de una puta vez pasando de los Vendepatrias del Bipartidismo

Ante el robo continuo y escandaloso por parte de las eléctricas y sus abusos en el recibo de la luz
propongo... 
actuar todos unidos como consumidores
contratando TODOS 
o en su defecto una gran mayoría,
  otra compañia eléctrica que no sea ninguna de estas dos (ENDESA - IBERDROLA) y cambiarnos a otra cualquiera de las muchas ofertas que existen hoy en día.

De tal forma que no les quede otra a las grandes que plegarse a nuestras demandas de una tarifa más justa y mucho más barata
o atenerse a las consecuencias 
de seguir con su estafa.

En nuestra mano está que siga este robo o cortar por lo sano para que no nos sigan mangoneando

ARMAK de ODELOT

Canción del Indignado Global

(solo pá Mentes preclaras 

libres de Polvo y Cargas)

Si me han de matar que sea,
 un Trump que de frente va

  no un Obama traicionero, 

que me venga por detrás.


Éstos del bipartidismo, 

a nadie ya se la dan

Tanto monta, monta tanto,

ser sociata o liberal.


Que harto me tienen sus cuentos, 

de crisis y guerras sin más

Cuando no hay bandera que tape, 

la ansia de un criminal.


Daños colaterales son, 

inocentes masacrar

si lo hiciéramos con ellos, 

no habría ni una guerra más.


Por eso pasa que pasa, 

que nadie se alista ya

a no ser que la CIA pague,
 
como al ISIS del MOSAD


A mí, que nunca me busquen, 

ni me llamen pá luchar.

Que yo no mato por nadie. 

Yo mato por no matar.


La paz de los cementerios 

es la paz del capital

Si soy rojo es porque quiero, 

en vida, vivir en paz.


Hoy tan solo mata el hambre, 

del rico por tener más 

Con el cómplice silencio, 

de toítos los demás.


Que preferimos taparnos, 

los ojos pá no pensar

O mirar pá otro lado, 

pensando que el mal se irá.


Creer que lo que a otro pasa, 

no nos tiene que importar.

Cá palo aguante su vela, 

repetimos sin cesar.


Éste es el mantra egoísta 

que rula por la sociedad

como si lo que le pase a otro, 

no te pueda a tí pasar


Más todo, cuán boomerang vuelve, 

al sitio de donde partió

y tal vez ocupes mañana, 

el sitio que otro dejó.


Mil pobres ceban a un rico, 

otros mil le dan jornal,

y otros cuantos dan su vida 

porque todo siga igual. 


Que no me coman la oreja, 

que no me creo ya ná

de sus guerras, sus estafas, 

ni su calentamiento global


Tan solo vuestras mentiras, 

esconden una verdad

que unos pocos están arriba 

y abajo tós los demás.


Da igual que seas ateo, 

cristiano o musulmán.

Solo los elegidos, 

el paraíso verán.


Hay medios alternativos, 

amarillos muchos más.

Unos más rojos que otros. 

Los menos, de radikal.


Más todos tienen su cosa, 

y a todos hay que hojear

Que comparando se tiene 

opinión más general.


Qué de tó aprende uno. 

Nadie tiene la verdad.

Ser más papista que el Papa, 

no es garantía de ná.


Solo creo en lo que veo, 

díjome santo Tomás, 

que el que a ciegas se conduce, 

no para de tropezar.


Y al enemigo, ni agua, 

ni nunca contemporizar

No dudes, tarde o temprano, 

siempre te la jugará.


No hay que seguir a nadie 

y a todos hay que escuchar.

Si tu conciencia te guía, 

de nada te arrepentirás.


Dá gusto ver a los ricos, 

pegarse por serlo más

mientras en eso se hallen, 

quizás nos dejen en paz.


Si te crees o no sus mentiras, 

a ellos les dá igual.

Con tomarlas por veraces, 

les basta para actuar. 


Que no me cuenten más cuentos, 

que tós me los sé yo ya.

Se demoniza a cualquiera

que no se deje robar.



No basta con ser un santo, 

sino ser de"su santoral"

Como la cojan contigo, 

no te valdrá ni el rezar.


Pensamiento único llaman. 

Anteojeras pá no pensar

más que en la zanahoria. 

El palo irá por detrás.


Si no crees en lo dictado, 

anti-sistema serás

Y por mucho bien que hagas, 

te van a demonizar.


Que no me coman la oreja, 

que a mí, no me la dan.

Que me sé todos sus cuentos 

y también, cada final.


Si de cañon, quieren carne, 

pál matadero llevar

que busquen a otro tonto, 

que este tonto no va más



No se ha visto en tóa la historia, 

otra estafa sin igual.

Que la madre tóas las crisis, 

que creó el capital


Y cuando tan ricamente, 

uno estaba en su sofá

Relajado y a cubierto, 

de inclemencias y demás,


te cortan sin previo aviso

el grifo de tu maná. 


Y te dejan sin tus sueños,
 
sin trabajo y sin hogar


y pá colmo y regodeo 

de propios y extraños, van

y te dicen como aviso

que al rojo no hay que escuchar


que son peores que el lobo,

del cuento y mucho más

y que si vas y los votas

toíto te lo robarán.



Si como votantes, no nos escuchan

como consumidores lo harán.

Boicoetemos sus empresas

Llevamos las de ganar. 


Si no queda más remedio

que dejarnos de robar

que sea otro y no el de siempre

tal vez así, aprenderá


No hay pan pá tanto chorizo,

dicen, cuando lo que sobra es pan.

Lo que no hay es un par de huevos
 
pá que no nos choriceen más.


Resultado de imagen de eladio fernandez refugiados suecia

Ellos tienen de tó

los demás, cuasi-de-ná

mas ellos son cuatro mierdas

y nosotros sémos más.


La próxima revolución 

contra las corporaciones será

y si ésta no se gana 

no habrá ninguna ya más.

Quien sepa entender que entienda

lo que digo es pá mascar

despacio y con buena conciencia.

Mi tiempo no dá... pá más


Armak de Odelot


Dicen: 

No será televisada, 

la próxima revolución.

Más como nadie se fía 

de lo que se nos dice hoy en día,

pasamos los días enteros, 

tumbados en el sofá

delante la caja tonta,

 por no perder el momento
del pase de la procesión 
que tós llevamos por dentro